10 consejos para mejorar tu productividad
Para ser un emprendedor, empresario o trabajador exitoso de cualquier empresa, debes conducirte bajo un horario en el que cumplas las metas propuestas. Quizás debas usar de vez en cuando la maniobra de las horas extras para poner al día labores pendientes.
No obstante, abusar de esta estrategia o trabajar desorganizadamente hace que la productividad se venga a menos y lo que quede sea el cansancio. O peor aún, no cumplir con los objetivos que te propongas deriva en el fracaso de un proyecto empresarial o en la pérdida de tu puesto de trabajo.
Por este motivo, expertos hacen hincapié en mejorar la productividad antes de aplicar cualquier estrategia que no represente una verdadera solución a los problemas que ocurren.
Si eres de las personas que procrastinan demasiado, sientes desgano a la hora de trabajar o tu empresa no se encuentra bien encaminada, quédate entonces con nosotros y descubre estos 10 consejos que te ayudarán a mejorar tu productividad.
Descansa bien y levántate temprano
Algunos expertos recomiendan que te levantes temprano para iniciar bien la jornada, pero esto es imposible si antes no regulas tus ciclos circadianos, lo que finalmente te ayudará a levantarte temprano. Procura dormir alrededor de 7 u 8 horas, especialmente si sueles ser un dormilón.
Trata de mantener un horario, de modo que a las 22:00 te encuentres haciendo los preparativos para irte a dormir. De esta manera vas a aprovechar ciertos instantes que tiene tu cerebro para rendir, que suelen ser generalmente las horas de la mañana.
Ejercítate durante la mañana
Muchos emprendedores trabajan por muchas horas en sus proyectos, y pasan largos momentos sentados en la computadora. Hacer esto no es saludable para quienes incurren en estas prácticas, por lo que te recomendamos que te ejercites en la mañana.
Según estudios, las personas que hacen ejercicio físico, concilian mejor el sueño ya que se le da al cuerpo una actividad para que se canse convenientemente. Esto promueve que seas más productivo al día siguiente.
Planifica tu rutina de trabajo
Una de las mejores maneras de aprovechar al máximo tu jornada laboral es planificándola. Usa entre 20 y 40 minutos al día para esta tarea, y por ninguna circunstancia consideres que estás perdiendo el tiempo
De hecho, el establecimiento de una buena agenda para trabajar te ayuda a definir prioridades con certidumbre y desarrollar los temas que son verdaderamente relevantes. Hacer esto a diario te permite incrementar tu visión global sobre las tareas que haces.
También tendrás la virtud de pronosticar reuniones que sean complejas, además que podrás distinguir nuevas técnicas que mejorarán tu productividad. Llegar temprano a tu sitio de trabajo hace que esos instantes de concentración sean tu compañero fiel para planear tu rutina.
Ponle un límite a las distracciones
Expertos concuerdan en que las distracciones son el peor compañero si deseas incrementar tu productividad. Ahora bien, para eliminar las interrupciones por completo debes saber identificarlas.
Las distracciones son en este caso interferencias causadas por los diversos instrumentos de comunicación, como los teléfonos móviles. También existen las distracciones de los compañeros de trabajo y las internas, relacionadas con tus pensamientos y lo que ocurre en tu vida personal.
Existen formas de evitar estas distracciones, como que apagues tu móvil en el momento que cumples tus tareas, trabajar con aditamentos para que tus colegas no interfieran o bien, utilizar tu tiempo libre para solventar los problemas que tienes a nivel personal.
Ordena tu lugar de trabajo y tu computadora
Tu lugar de trabajo está dividido en dos partes: el real, que viene a ser el nivel u oficina donde trabajas y el virtual, que es la computadora. No puedes ser eficaz si tu ambiente de trabajo se encuentra desordenado, especialmente si empleas tiempo para buscar documentos importantes.
La finalidad exclusiva de trabajar en un espacio ordenado es aumentar tu desempeño, y si es preciso, favorecer el surgimiento de ideas creativas.
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Ataca en primer lugar las tareas más complejas
Para mejorar tu productividad es importante que establezcas prioridades y afrontes las tareas más difíciles. Cuando comienza el día, los niveles de concentración son más altos, al mismo tiempo que tienes más energía para trabajar.
Como consecuencia, solucionas los problemas complicados rápidamente y con mayor eficacia. No dejes ninguna tarea por pequeña que sea para el final, y evita tomar riesgos equivocándote si no tienes la mejor aptitud física o mental.
Trabaja en bloques e incluye descansos
Mejorar el rendimiento no quiere decir que tengas que trabajar más, sino trabajar de una mejor forma. Para lograrlo debes concentrarte en una tarea haciendo frente a las distracciones. No obstante, hacer esto durante tus horas de trabajo es imposible.
Todas las personas necesitan de un receso y desconectar de vez en cuando. Por ello te sugerimos que organices tus deberes en bloques, y descanses en el espacio que hay entre dichos bloques.
Estudios afirman que los descansos contribuyen a optimizar el rendimiento. Esto es fundamental para que el cerebro se reactive y se enfrente a nuevas asignaciones con mayor energía.
Delega ciertas tareas en las que no seas indispensable
Delegar es complicado para muchas personas, pero es una habilidad que se puede aprender y de la que requieren numerosos empresarios para lograr el crecimiento de sus negocios, para finalmente conseguir un impacto positivo gracias a sus empleados.
Cuando realizas ciertas tareas por tu cuenta puede ser positivo en el corto plazo, pues alcanzas metas tangibles en poco tiempo. No obstante, a la larga puedes perder tiempo que pudieses invertir para hacer tareas más importantes. Delega ciertas funciones en personas de tu confianza.
Atiende un tema a la vez
Es común que las personas alaben a quienes son multitarea, y si consideras que esto es una ventaja estás en un error. Planificar correctamente tus tareas y atacar con determinación las actividades más complejas te ayuda a adoptar la habilidad de enfrentar un tema a la vez.
La idea es que te concentres realmente para solucionar inconvenientes o planificar negocios más recientes. A esto se suma que podrás hacerlo en el menor tiempo posible. Haz a un lado las distracciones y cíñete a tu agenda de trabajo.
Sistematiza todas las tareas
Todo lo que ocurre en tu negocio, desde las tareas de marketing hasta las compras realizadas por la audiencia, puede contar con procesos que hagan cada fase más simple. Si notas que hay pasos en tu negocio que son lentos, puedes automatizarlos.
Consigue un modo en que en tu empresa funcionen algunas cosas sistematizadamente, lo cual te libera de cargar con esa responsabilidad, permitiendo que todo marche correctamente.