Antes de empezar hablemos sobre un tema que parece ser de conocimiento general. Puede que estés familiarizado con el concepto de que existe una parte inconsciente en tu mente.

Tal vez hayas escuchado cosas como que el inconsciente siempre está escuchando, cuidando de todo lo que es esencial para que puedas vivir tu vida feliz y saludablemente. Desde la respiración hasta la digestión y el sueño, tu mente inconsciente se encarga de millones de procesos cada día.

Mientras eso ocurre, tu mente consciente está aquí leyendo este texto y es totalmente consciente de todo lo que te estoy contando. La mente consciente también es la que trabaja cuando desarrollas ese diálogo interno contigo mismo.

Pero aquí está la realidad, no hay tal cosa como una mente inconsciente o consciente. Estas son descripciones, no son empíricas. Pero de igual modo usamos las palabras consciente e inconsciente para describir varios procesos psicológicos.

En este punto es apropiado comenzar con nuestro tema de hoy. Ten presente que en realidad nuestra mente puede ser bastante más compleja que las descripciones que ella puede hacer de sí misma. Y podemos aprovechar esto a nuestro favor.

¿Qué son las órdenes encubiertas?

Una orden encubierta es una forma de sugerencia o comando que, como el nombre lo sugiere, está escondida dentro de la comunicación, o en el marco de un contenido de mayor extensión. En inglés se le conoce como embedded commands.

Algunos expertos la consideran una técnica de la Programación Neuro-Lingüística (PNL), aunque existe cierto debate sobre este punto. El origen del interés por este tipo de técnicas vino del campo de la hipnosis clínica, un método que disfrutó de gran popularidad en el siglo pasado.

Por ahora, lo primero que debes entender es que esta técnica se basa en presentar las sugerencias u órdenes en una forma tal, que la mente consciente no las detecte. Una vez pasado este filtro, es mucho más fácil que esta orden sea asumida con poca resistencia.

Origen del concepto de órdenes encubiertas

Milton Erickson fue un médico considerado como uno de los más importantes hipnoterapeutas de la historia. No es de extrañar que los cofundadores de la PNL, Richard Bander y John Grinder, decidieran modelar su trabajo y averiguar exactamente qué lo hacía tan bueno.

Durante el tiempo que pasaron aprendiendo de Milton, empezaron a notar un patrón en la forma en que hablaba con sus clientes. No pasó mucho tiempo hasta que pudieron formalizarlo, y esto se conoce desde entonces como el Modelo Milton.

En resumen, el Modelo Milton permite ser “artísticamente vago” en lo que se dice, lo que permite al sujeto crear un significado que sea apropiado para sí mismo. Milton aplicaba patrones de lenguaje específicos en sesiones de hipnosis, para ayudar a sus clientes a resolver problemas en su vida.

Por tanto, el modelo Milton es un modelo hipnótico, cuyo objeto es establecer una comunicación con los procesos inconscientes de las personas. Pero en PNL podemos utilizar algunos de estos patrones en conversaciones normales.

Las órdenes encubiertas son apenas uno de hasta una veintena de patrones que se incluyen en el modelo Milton.

Marqueo Analógico

Las órdenes encubiertas implican hacer sugerencias indirectamente dentro de una declaración mayor. Haciendo que su voz sea más baja, más lenta, o más enfática y más fuerte, por ejemplo, la mayoría de las declaraciones pueden incluir una orden encubierta incorporada.

En PNL esto se llama marqueo analógico. La comunicación analógica es entregar un mensaje sin palabras o más allá de las palabras. Así es como se comunican los animales, con sonidos y comportamiento.

Al marcar de forma no verbal alguna parte de una comunicación, la mente inconsciente identifica y entiende esta parte de forma diferente. Esta marca puede ser conductual (un gesto o movimiento de lenguaje corporal) o usando el tono de voz, el volumen, la velocidad, etc. Por ejemplo:

• Mi amiga sabe cómo sentirse bien consigo misma. El sentirse bien se puede enfatizar diciéndolo un poco más alto, más lento o más rápido.
• No hay necesidad de que te relajes ahora mismo. La última parte puede ser marcado con un gesto de la mano.
• Háblame cuando estés listo. El Háblame podría ser marcado con un movimiento corporal.
• Hola, siéntate y relájate. La última parte puede enfatizarse, de manera que se marca analógicamente como una orden.

Razones para aprender a usar órdenes encubiertas

Aquí hay tres razones por las que necesitas aprender cómo dar efectivamente órdenes encubiertas en la vida cotidiana, o al menos saberlas identificar:

Controlar cómo piensan las masas

Los políticos usan órdenes encubiertas en sus discursos continuamente. Si puedes integrar órdenes encubiertas directamente en tus discursos, presentaciones y conversaciones, puedes sugestionar a muchas personas a tomar decisiones y realizar acciones específicas.

Evitar ser sugestionados (o hacerlo adrede)

Hace unos años escuché a dos mujeres hablando. Una mujer se quejó de un dolor de cabeza y luego, por pura casualidad, pasó los siguientes cinco minutos usando órdenes encubiertas para hacer que su amiga sintiera el mismo dolor.

Como la escuché con atención puedo dar fe de que esto comenzó a afectarme también. Si ella pudo hacer esto por accidente, imagina lo que la gente podría estar haciéndonos voluntariamente. ¿Quieres aprender a evitar que esto suceda?

Cerrar ventas

Un vendedor por teléfono utiliza frases como la siguiente: Antes de considerar la compra, hablemos de los beneficios para que puedas tomar la decisión correcta. Así podrás comprar con confianza.

Incluso sin la entonación de la voz, de seguro puedes identificar las órdenes encubiertas. Esto ocurre porque las estás esperando. Una vez que tengas esta habilidad, imagina lo poderosa que puede ser una simple frase como esta para cerrar ventas.

Los publicistas, los profesionales de las ventas, los políticos, todos saben de estas ideas y no son nada tímidos al usarlas. Saber que existen estas herramientas te permite entender cómo están siendo usadas y ser conscientes de ellas antes que sean captadas por tu inconsciente.